En la lluvia inesperada de Málaga
la osita Lina juega octaedros
en la pieza Kindberg,
ojos atados de Cortázar.
Tiemblan pechos de lolitas
en el frío,
en turnos de noche
encerrados en idearios de hormigón,
sin dinero para ser inmorales.
Rompe el absurdo
el tren de cercanías,
rompe el éxtasis de Coltrane,
el sueño de un amor supremo
en las proximidades de la insolvencia.
El ruido ciega la belleza.
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Siempre es un placer leer buenos versos como los tuyos, te felicito.
ResponderEliminarSaludos.
chico, en la boda de tu hermana comprobé lo bien que escribías, pero ahora me has dejado sin palabras. enhorabuena!
ResponderEliminarbesitos para tu familia de 3.
Deseo concedido. Mi canción favorita de jazz es "A love supreme" de John Coltrane. ¿Otra coincidencia o quizás no?
ResponderEliminarUn beso