Me divierte ulular y bailar,
sacrificar ciempiés;
todo alrededor de espacios protegidos.
Como ultílogo,
estoy ajeno
a la importancia capital
de vuestro tiempo.
Mi vida es un paseo secuestrado
hacia terrenos vedados.
Siempre recordar
la encimera,
la penetración breve y rabiosa.
Tus ojos perdidos,
tus uñas en la espalda
nada tienen que ver con
esta idolatría del vacío.
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Hay vacíos que llenan.
ResponderEliminarTambién yo eché de menos tu visita.
Un beso.
Qué padrazo estás hecho, qué foto más bonita...
ResponderEliminarLeí tu poemario, me gustó bastante. Me gustaría colgar en mi blog (con tu permiso) uno que empieza así: "Estoy ahogándome en la lenta decrepitud del sueño..."
Un beso.